La leyenda Zagallo hubiera cumplido los 93 años

El mayor campeón del mundo de la historia del fútbol falleció el 5 de enero de este año.
por
Camil Straschnoy
2024-08-09 18:26:54

Mário Jorge Lobo Zagallo, el mayor campeón mundial de la historia, hubiera cumplido hoy 93 años. Único tetracampeón del mundo, el Viejo Lobo falleció el 5 de enero de este año a los 92 años. Su larga carrera futbolística se destacó por la conquista de las Copas Mundiales de 1958 y 1962 como jugador, del Tri de 1970 como entrenador de uno de los mejores equipos de todos los tiempos, y del Tetra de 1994 como coordinador técnico del título dirigido por Parreira.

Nacido en la ciudad de Atalaia, en el municipio de Alagoas, a 48 kilómetros de Maceió, el hijo de Haroldo Cardoso y Maria Antonieta se trasladó a Río de Janeiro a los ocho meses de edad y comenzó su andadura en las competiciones locales. Tras jugar en las categorías inferiores del América-RJ, debutó en el Flamengo en 1951 y convocado para el Mundial de 1958 debido a sus actuaciones en el Rubro-Negro. En el Mundial de Suecia, marcó uno de los tantos de la goleada por 5-2 sobre los anfitriones.

LEER MÁS
++ Los momentos más memorables de Zagallo como jugador
++ Los momentos más memorables de Zagallo como entrenador de Brasil
++ Los Mundiales de Brasil en 1958 y 1962: recordando a Zagallo

Luego pasó al Botafogo, donde también hizo historia y se ganó el corazón de los aficionados. Jugó en el Glorioso hasta 1965, al lado de estrellas como Garrincha, Didi y Nilton Santos. Rivales, Flamengo y Botafogo comparten pasión y gratitud por Zagallo. Aunque empezó su carrera en el Gávea, es un ídolo en el General Severiano. Desde 2014, el 9 de agosto, día del cumpleaños del Viejo Lobo, se celebra el Día del Hincha del Botafogo.

Zagallo dejó el campo, pero no el fútbol

Alejado de los terrenos de juego tras dejar el Botafogo, Zagallo no se distanció del fútbol. Al contrario, volvió a los banquillos para entrenar al Botafogo en 1966 y ganó el campeonato brasileño en 1968. Al año siguiente, se hizo cargo de la selección brasileña para llevarla al Tri, con un equipo formado por leyendas como Alberto Torres, Clodoaldo, Jairzinho, Rivellino, Tostão, Gérson y el más grande de todos, Pelé.

Antes de regresar a la selección para la campaña del Tetra, dirigió durante más de 20 años a clubes como Vasco, Fluminense, Botafogo, Flamengo y Bangu, así como a las selecciones nacionales de Kuwait, Arabia Saudí y Emiratos Árabes Unidos, y al equipo saudí Al Hilal. En 1991, el entonces seleccionador de la Amarelinha, Carlos Alberto Parreira, invitó a Zagallo a ser el coordinador técnico de Brasil y a ayudarle a ganar la Copa Mundial de 1994. La colaboración fue un éxito, que culminó con el título en la tanda de penales contra Italia en Estados Unidos.

Tras la victoria, regresó como entrenador del equipo y dirigió el ciclo hasta el Mundial de Francia 1998, ganando la Copa América y la Copa Confederaciones de 1997. Pudo haber añadido una quinta estrella al uniforme verde y amarillo, pero fue derrotado en la final por los franceses.

Tras la derrota, Zagallo dejó la selección y entrenó al Portuguesa-RJ y al Flamengo. Con el Flamengo, levantó el trofeo Carioca 2001, un título muy especial para el club gracias al gol de falta de Petkovic contra el Vasco en los últimos minutos del partido.

Pero Zagallo es sinónimo de la selección brasileña y aceptó de nuevo la invitación de Carlos Alberto Parreira para formar parte del cuerpo técnico hasta el Mundial de Alemania 2006. Sin embargo, el quinto título mundial no llegó para el alagoano, que ya había ganado la Copa América en 2004 y la Copa Confederaciones en 2005. Tras el Mundial, se retiró definitivamente del fútbol.

Homenajes

En homenaje a la vida de Zagallo, la Confederación Brasileña de Fútbol (CBF) le rindió tributo durante la victoria por 1-0 de Brasil sobre Inglaterra, en marzo, en el estadio de Wembley. Fue el primer partido de la Amarelinha tras el fallecimiento de una de las mayores figuras responsables de la grandeza de la Selección Brasileña. Los jugadores vistieron una camiseta con un parche conmemorativo, y el capitán del equipo, Danilo, portó una bandera especial.

Su histórica carrera y su vida también fueron recordadas durante el partido de la Supercopa Rei, con un minuto de silencio en el minuto 13, un número especial para el mayor campeón mundial de la historia, y con un panel expuesto en la sede de la CBF en Río de Janeiro. Además, desde 2022, Zagallo tiene una estatua en su honor en el Museo de la Selección Brasileña, en una sala donde se exponen los cinco trofeos de la Copa del Mundo. El Viejo Lobo fue responsable de cuatro de ellos.