El presidente de la Confederación Brasileña de Fútbol (CBF), Ednaldo Rodrigues, debe dejar su cargo. Así lo ordenó un tribunal de Río de Janeiro que basó su fallo al considerar inválido un acuerdo entre la entidad y el ministerio público que alteró las reglas para su elección poco antes de ser designado en marzo de 2022.
La justicia indicó que la CBF deberá realizar una nueva elección de autoridades en un plazo de 30 días y nombró como interventor al presidente del Superior Tribunal de Justicia Deportiva (STJD), José Perdiz. Igualmente, Rodrigues puede apelar la decisión a una instancia superior.
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Cómo puede afectar la salida del presidente de la CBF
La FIFA alertó en una carta a la CBF que cualquier “influencia de terceros” sobre sus miembros puede acarrear “posibles sanciones”. Aunque parece una posibilidad lejana, si la entidad rectora del fútbol mundial considera que este fallo de la justicia es una intromisión de este tipo, puede dictaminar sanciones severas.
Una de las consecuencias podría ser la exclusión de equipos brasileños de competiciones internacionales y ya suenan las alarmas en el Fluminense. Es que el campeón de la Copa Libertadores está por participar en el Mundial de Clubes que se disputará en Arabia Saudita del 12 al 22 de diciembre.
Más allá de esto, hay que ver si la salida de Rodrigues tiene un impacto también en las negociaciones para la llegada de Carlo Ancelotti a la selección de Brasil. El mandamás de la CBF estaba a cargo de las negociaciones y garantiza que tiene un acuerdo con el entrenador italiano, que por su parte nunca lo confirmó oficialmente.
