La tan ansiada final de la Champions League tuvo su desarrollo este domingo 23 de agosto en el Estadio Da Luz, en Lisboa. El equipo francés del Paris Saint-Germain debutaba como finalista de esta competencia, ante un experimentado Bayern Múnich.
Ambos clubes -dirigidos por técnicos alemanes- llegaron con la esperanza de ser los más grandes de Europa, y luego de un partido equilibrado, los dirigidos por Hans-Dieter Flick, se llevarían la orejona al ganar 1-0 con gol de Coman.
Este campeonato es el sexto en la historia del club bávaro, siendo el primero bajo el mando de Flick.
Desde el arranque del partido el juego estuvo con llegadas de peligro para las dos escuadras, con un Bayern presionando desde la salida. Por su parte el PSG supo quitarse la presión y el tridente de Neymar, Di María y Mbappé; estuvieron cerca de abrir el marcador antes de cumplirse los 15 minutos de partido.
El Bayern también tendría sus oportunidades con Lewandowski, Coman y compañía, estrellando el esférico en el palo en una oportunidad.
Tanto Keylor Navas como Manuel Neuer fueron protagonistas, salvando sus respectivos arcos durante todo el encuentro.
Mbappé y Neymar representaban constantemente una amenaza para la escuadra roja, que al ver que el PSG estaba aprovechando los espacios, decidieron retroceder unos metros todas sus líneas.
Al descanso se fueron 0-0, pero el Bayern Múnich finalizó al ataque sobre un PSG que lucía cada vez más desordenado atrás.
En el torneo de la Champions League hay una especie de superstición, que ningún equipo que ha jugado por primera vez una final, ha podido ganarla. Verdadero o no, ayer no se pudo romper el presagio.
Al minuto 59 se concretaría la gran noche de Coman el bávaro, pues sería este el que de cabeza anotaría el único gol del encuentro que daría al Bayern sus sexta Copa de Champions League.